La razón por la que sufrimos el calor y el frío y padecemos mucho dolor, pena y amargura es porque somos extranjeros en esta tierra; este no es nuestro hogar.
Dios se apiadó de la humanidad. Para llevarla de regreso al hogar celestial, vino con el nombre de Jesús en su primera venida y fue crucificado por nuestros pecados que merecían la muerte, y vino de nuevo con el nombre de Cristo Ahnsahnghong y restauró la verdad de Dios del árbol de la vida que había sido pisoteado por Satanás.
- Fecha de publicación
- 2025. 03. 05
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- 134
